Amigas, hoy vamos a tocar un temita que, aunque parezca pequeño, tiene su debate en el mundo de la decoración y el cuidado de los muebles: el uso (o no uso) de los portavasos o coasters. Sí, esos pequeños salvavidas (o estorbos, según como lo veas) para nuestros queridos muebles. Vamos a chismear un poco sobre los pros y contras de usarlos en tu casa. Porque, ya saben, en cuestión de gustos y muebles... ¡hay de todo!
Pros de Usar Portavasos
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Adiós a las Manchas: Lo más obvio y por lo que existen, ¿no? Los portavasos protegen tus mesas de esas odiosas marcas de agua que dejan las bebidas frías (o calientes, porque el café también tiene lo suyo). Además de cuidar pequeños derrames.
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Estilo y Personalidad: No todo es función, también hay forma. Hoy en día hay portavasos de mil estilos, colores y materiales. Pueden ser un detallito más para mostrar tu estilo único. Desde los más boho de corcho hasta los ultramodernos de mármol, hay un portavasos para cada quien.
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Cuidado a Largo Plazo: Usarlos es como pagar un seguro, en el momento no ves el beneficio peeero... a largo plazo, vas a agradecer haberlos tenido porque eso significa menos desgaste y más vida para tus muebles.
Contras de Usar Portavasos
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Interrumpen el Diseño: Aquí entre nos, a veces los portavasos simplemente no van con la vibra que buscas para tu espacio. Pueden sentirse como un elemento extraño que no encaja con tu mesa de centro minimalista de diseño escandinavo.
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Siempre Desaparecen: ¿Soy la única a la que los portavasos le juegan al desaparecido? Uno los necesita y ¡bye! no están. Claro, hasta que haces limpieza general y aparecen en los lugares más insospechados.
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Flojera Nivel Dios: A ver, a veces simplemente da flojera buscar uno o hasta se nos olvida. Estás ahí, super cómoda en tu sillón viendo tu serie favorita, y levantarte por un portavasos... mmm, mejor no.
¿Entonces, Qué Hacemos?
La verdad es que no hay una respuesta única. Como todo en la decoración (y en la vida), va a depender de tus prioridades y estilo de vida. Si eres de las que valora la practicidad y quiere mantener sus muebles impecables por más tiempo, los portavasos son tus aliados. Pero si lo tuyo es mantener una estética impecable y prefieres la comodidad, quizás decidas no usarlos y confiar en el acabado de tu mueble.
Lo importante es que hagas lo que hagas, lo hagas con gusto y pensando en lo que te hace feliz a ti y a tu hogar. Al final del día, los muebles están para disfrutarse (con o sin portavasos). Y en caso de cualquier manchita pues usar un buen producto como la espuma limpiadora de Ensamble Care Lab.
Y tú, ¿team portavasos o team libertad? ¡Cuéntanos en los comentarios!